lunes, 27 de julio de 2009

SINDICALISTA RETRÓGRADO Y PIQUETERO

La verdad es que me ha sorprendido gratamente la firmeza mostrada por el gobierno ante la patronal. Por tanto estas palabras, pronunciadas por Esperanza Aguirre con la intención de insultar al presidente por la forma en que se han llevado las negociaciones para consensuar una nueva reforma laboral, son en realidad halagos para un gobierno que no se ha echado en brazos de los empresarios y ante la tesitura de elegir con quien caminar de la mano ha elegido a los trabajadores.
La CEOE ha utilizado la táctica de siempre, la del miedo. Miedo a un futuro que ellos se han encargado de abonar con sus prácticas tiránicas. Ahora quieren erigirse en salvadores de una situación que ellos han creado y para ello pretenden nada menos que ahondar en la desprotección del trabajador, liberalizando totalmente el despido y evitando la protección jurídica de aquel. Estas tesis siguen los dictámenes del liberalismo más sombrío que, no olvidemos, es el máximo responsable de la actual crisis económica; pretenden con ellas arreglar lo que ellos mismos desarreglaron y salir enormemente fortalecidos para de aquí en adelante tener las manos más libres aún y así poder hacer y deshacer a su antojo.
Es de agradecer por tanto que el PP de boca de la presidenta de la Comunidad de Madrid piropee de esta forma al presidente del gobierno, ya que de una forma directa nos dice claramente quien está del lado de quien en el mapa laboral.

sábado, 4 de julio de 2009

SOBRE LA NUEVA LEY DEL ABORTO

Se lleva largo tiempo hablando acerca de la propuesta de reforma de la ley del aborto, la actual ley tan sólo despenaliza el aborto en una serie de supuestos, lo que hace necesaria la creación de una ley de plazos similar a la que existe en muchos otros paises de Europa y que otorgue a la mujer el poder de decisión. Esto parece ser entendido por la gran mayoría de la población española, ya que legisla de algún modo aquello que igualmente se hace, pero buscando cómo disfrazarlo de cualquiera de los supuestos que contempla la actual ley.
Sin embargo el gran escollo que encuentra esta ley y que más reticencias abarca es la posibilidad de que las mujeres de hasta dieciséis años puedan abortar sin el consentimiento de sus padres o tutores legales. A mí realmente no me entra en la cabeza que una hija estuviera dispuesta a pasar por semejante trance sin el apoyo de sus padres; y si yo fuera padre de una adolescente de esa edad que se quedara embarazada y decidiera abortar, quiero pensar que mi relación con mi hija sería lo suficientemente fluida para que pudiera confiarme la situación por la que está pasando. Si hay padres e hijas que no pueden confiarse algo así, indudablemente algo falla en esa familia.
En cuanto a esta ley que se pretende crear, tenemos que pensar que las leyes se hacen para todo el mundo, pretendiendo que en todo momento sea la mayoría de la población la que resulte protegido por ella. Y en este caso es obvio que el hecho de que una chica de dieciseis años aborte sin el conocimiento o el consentimiento de sus padres es algo terrible, pero más terrible aún sería que esa chica se viera obligada por sus progenitores a concebir un hijo que no desea con el que va a tener que vivir el resto de su vida, y muy especialmente durante los próximos años, que son fundamentales tanto en el desarrollo social, cultural y educacional de la mujer de dieciséis años como del recién nacido.